Surgida en las filas de Cris Morena, la actriz se destaca en “Dulce amor”. Allí disfruta de un éxito “inesperado”. Además, trabaja y se luce en teatro. Aquí cuenta por qué se alejó de la TV y cuánto le costó regresar.
El bello rostro de Micaela Vázquez sonaba más que conocido cuando comenzó este año en su rol de Florencia Guerrero, la hermana adolescente de Marcos (Sebastián Estevanez), que lucha por el amor de Lucas (Nicolas “Tacho” Riera), en “Dulce amor”. Aunque hacía tiempo que no trabajaba en televisión. Micaela arrancó de la mano de Cris Morena (“Ella es una escuela aparte, te educa y te muestra como nadie de qué se trata todo esto”) en “Chiquititas”, “Rebelde Way” y “Floricienta”, que aún se pueden ver sus repeticiones y resultó su último papel en la pantalla chica hasta su regreso triunfal en la novela de Telefé. ¿Qué pasó en el medio? Estuvo cuatro años alejada de los medios porque vivió en España junto al futbolista Fernando Gago hasta que, separación mediante, decidió volver a la Argentina para cumplir su propio sueño.
“Aquella decisión tuvo pros y contras. Es muy difícil vivir afuera y, en cuanto a la televisión, desaparecés totalmente. Es muy difícil reinsertarse porque aparecen muchas caras y actores nuevos todo el tiempo. Pero no me arrepiento de nada porque estuve estudiando y trabajando. Además tuve momentos buenos y, también, otros malos... Ahora estoy mucho más nutrida y creo que sorprendí porque cambie totalmente a la de chica ‘Rebelde Way’ que era”, le comenta Micaela a La Razón.
¿De qué estuviste trabajando en España?
Conduje un programa de juegos telefónicos, una suerte de “Call TV”. “Suerte Latina” se llamaba. Me divertía mucho, hablaba con los participantes, gustaba mucho mi acento argentino y también imitaba la forma de hablar de los españoles.
¿Cuándo regresaste, cuánto te costó volver a trabajar?
Estuve dos años haciendo casting, casting... y no se daba nada. Hasta que hice un casting con Quique (Estevanez, productor de la tira) y ahí volví con miedo (risas), porque muchas veces me frustré en ese lapso. Pero si confiás las cosas salen, hay que ser positivo. Por eso, ahora que estoy en este lugar no me queda otra que agradecer.
¿Esperabas el éxito que tiene “Dulce amor”?
Fue inesperado, no lo podemos creer, estamos con un alegría que nos desborda y hay un clima bárbaro. Una semana antes de empezar nos cambiaron el horario (estaba pensada para que saliera al mediodía) y nos dio mucho miedo, pero después fue todo alegría. En la calle me saludan todo el tiempo, todo el mundo habla de “Dulce amor”, porque es para todo público. Hasta mi abuelo lo ve.
La antítesis de Flor, en el teatro
Los viernes Micaela sale corriendo de las grabaciones de "Dulce amor" para subirse, a las 21, al escenario del Teatro Casa Ofelia (Honduras 4761), con la obra "Next".
Allí cuatro mujeres, con distintas personalidades, no tienen problemas a la hora de hablar de sexo. "Mi personaje es la más sexual, la más física, la más corporal.
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